ATAL

Aulas Temporales de Adaptación Lingüística

Hace ya algunos años, el número de alumnos inmigrantes en las aulas del país se ha incrementado considerablemente, lo que favoreció en nuestra comunidad autónoma el desarrollo del Plan Andaluz de Educación de Inmigrantes (2001), en el que se hace mención a una serie de medidas para que la integración en los centros de estos alumnos extranjeros no provoque desajustes originados sobre todo por dos causas: el desconocimiento de la lengua y las dificultades, en algunos casos, de aprendizaje provocadas por la escasa educación recibida en sus países de origen.

Dentro de dicho plan se hace especial mención a las llamadas Aulas de adaptación lingüística (ATAL). Se trata de espacios regidos por un profesorado especializado cuya principal finalidad es proteger al niño ante el cúmulo de novedades y extrañezas que le rodean, y procurar su rápida inmersión en la lengua y cultura del país de acogida. Otras de las labores del profesorado de las ATAL es ofrecer orientación al resto de profesores que se ocuparan del alumno inmigrante una vez se haya incorporado a la enseñanza normalizada, así como evitar el desarraigo cultural e impulsar la participación de la familias inmigrantes en el ámbito escolar entre otras.

Dentro de las ATAL se diferencias dos modelos: las itinerantes y las fijas.

En las itinerantes, el profesorado se desplaza de unos centros a otros dentro de una misma zona.

En las fijas, el profesorado se mantiene siempre en el centro y forma parte del claustro del mismo. En estas aulas hay un mayor número de alumnos que en las itinerantes.

En un primer momento, el profesor especializado deberá llevar a cabo un análisis de los alumnos extranjeros, a fin de conocer sus conocimientos del idioma. A partir de los resultados obtenidos, se llevará a cabo un Plan de Trabajo del Aula. La asistencia a estos alumnos debe realizarse, siempre y cuando sea posible, dentro del aula ordinaria. Solo en aquellos casos de especial dificultad en la comprensión de la lengua, se crearán grupos de apoyo fuera del aula (ATAL). La atención a estos grupos de apoyo se lleva a cabo durante un trimestre en el caso de las ATAL fijas, o durante un curso escolar en el caso de las ATAL itinerantes; si bien las evaluaciones continuas a los alumnos por parte del profesor le permitirán decidir el momento de la finalización del apoyo.

La agrupación de los alumnos es un aspecto complicado pues suele haber un abanico amplio de edades y, en algunos casos, son niños que continuamente se están desplazando junto a sus familias. Por tanto, se intentan hacer grupos con niños de edades y nivel de adquisición de la lengua, similares. 

En lo que se refiere a la metodología, principalmente se emplea un enfoque comunicativo, es decir, se busca sobre todo desarrollar la competencia oral, aunque también se pone atención a las competencias de comprensión y expresión escrita.

Por tanto, las ATAL forman parte de un plan de atención a la diversidad cultural que busca favorecer la igualdad entre todos los alumnos del sistema educativo, y por ello prestar ayuda especial a aquellos cuyas costumbres e idiomas son diferentes al nuestro, de manera que la integración a la educación normalizada se lleve a cabo lo antes posible. Al mismo tiempo, desde este plan se procura crear un ambiente de cohesión, convivencia y respeto entre todos los alumnos del centro independientemente del lugar de origen.